lunes, 25 de febrero de 2013

Método para perder peso: Cetosis - la verdad


Se ha discutido mucho sobre si el ayuno es verdaderamente efectivo a la hora de perder peso. Muchos planes de ayuno tratan de superar este problema ofreciendo algún cambio muy específico al azar, como el ayuno del zumo o las dietas de ayuno a base de agua. Pero estas pequeñas diferencias simplemente intentan esconder lo más importante que necesitas saber para perder peso de manera efectiva con tu ayuno. Sí, un ayuno puede hacer que pierdas peso, pero tienes que hacerlo bien. Y, sorprendentemente, esto no significa necesariamente el beber algún líquido específico durante el ayuno.

Si realmente quieres perder peso ayunando, necesitas saber cuál es la base científica que apoya este proceso, pon mucha atención a estos consejos para bajar de peso. Empieza con algo que se llama cetosis. La cetosis es un proceso perfectamente natural que afecta a tu cuerpo que se produce una vez que el nivel de nutrientes que tiene alcanza un mínimo determinado. Cualquier persona que ayuna durante mucho tiempo habrá pasado por esta experiencia, al igual que muchos diabéticos. Ahora, esta es la parte importante que tanto los defensores como los detractores de este proceso suelen dejar de mencionar: antes de que tu cuerpo experimente el proceso de cetosis, no estarás quemando grasa.

Antes de que llegue este momento, tu cuerpo solo está perdiendo agua. El peso volverá a ti rápidamente una vez que empieces a comer de nuevo. Aprende a discernir las señales de la cetosis, como un cambio en el olor corporal, para que sepas cuándo estás empezando verdaderamente a quemar grasa. Una vez que estés experimentando la cetosis, el tiempo que decidas seguir ayunando dependerá, no solo del peso que quieras perder, sino también de tu salud física y mental. Quizá puedas estar ayunando durante largos periodos de tiempo, incluso durante semanas, antes de que necesites dejar de hacerlo. Pero, en cualquier caso, si paras antes de entrar en cetosis, no te molestes en empezar. Esta es la razón por la que tanta gente se queja de que el ayuno no les ayuda a perder peso.

Hay un gran número de razones por las que puede que no quieras ayunar, por supuesto. ¿Te enfrentas continuamente a situaciones difíciles psicológicamente o trabajas en un ambiente muy estresante? ¿No estás dispuesto a dejar de entrenar? ¿Tienes que tomarte algún tipo de medicación de forma regular, aunque sea una muy ligera y que se venda sin receta? ¿Tienes algún problema de salud, sobre todo algún problema relacionado con la nutrición? No te arriesgues a ayunar si has respondido afirmativamente a alguna de estas preguntas. En vez de eso, trata de hacer una dieta normal. El ayuno estará ahí para cuando lo necesites, por lo que no hace falta que te des prisa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario